Después de la fantástica tarta de Guinness, que nos quedó estupenda (y sino que se lo digan a mí hermano mayor que se llevó la mitad jeje), os muestro lo que he cenado hoy: unas estupendas salchichas de cerdo a la cerveza con cebolla, champiñones y puré de patata.
Lo primero los ingredientes:
- 4 Salchichas de cerdo
- 4 o 5 champiñones no muy grandes
- 1/4 de cebolla
- 1/2 de botellín de cerveza
- Puré de patata
- 1 cucharada de harina
- Sal
- Aceite
- Perejil
El resultado de la mezcla de todos estos ingredientes fue el siguiente:
1.- Lo primerísimo que quiero decir es que la presentación no es lo mío, y ni siquiera me dí cuenta de ponerlo todo un poco bonito para la foto así que os tendréis que conformar con esta chapuza de presentación jaja.
2.- Ojo a la elección de la cerveza, vale casi cualquier tipo pero yo descartaría las porter, stout, y las excesivamente lupuladas, porque un sabor demasiado fuerte puede encubrir todo lo demás del plato (la novia estará ahora mismo por detrás diciendo "como si eso fuera un manjar...si son unas puñeteras salchichas" jajaja).
3.- Es una receta simple y fácil de hacer, sin complicaciones, "de estar por casa" y con ingredientes que a todo el mundo gustan y fáciles de encontrar.
ELABORACIÓN:
Esto nos llevara unos 20 minutos nada más. Ponemos las salchichas a freír con un pelín de aceite hasta que estén doradas. Después las sacamos y las reservamos.
En otra sartén o limpiando la misma (las salchichas sueltan demasiada grasa y si podemos evitar ese aceite grasiento y oscuro mejor) ponemos la cebolla y los champiñones a pochar a fuego medio-lento con aceite y sal.
Mientras podemos hacer el puré de patata. Yo lo hago de sobre que está bien bueno y se "lía" menos que con el natural.
Cuando la cebolla y los champiñones estén bien pochaditos, añadimos de nuevo las salchichas y vertemos media cerveza, que más o menos cubra las salchichas y dejamos que evapore el alcohol, si pasados 5 minutos vemos que la salsa está muy líquida, añadimos una cucharada pequeña de harina para que espese y dejamos reducir.
Cuando veamos que la salsa a reducido bastante y está bien ligada apagamos el fuego, servimos, y nos comemos la cena cojonuda de esta noche.
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